La palabra “hidroponía” proviene de los vocablos griegos ὑδρο (agua) y πόνος (labor, trabajo). Se trata de un método de cultivo en el cual las raíces de las plantas reciben los nutrientes esenciales para su desarrollo a partir de soluciones minerales en vez de suelo agrícola. Las plantas pueden crecer únicamente en las soluciones nutritivas, o bien, en un medio inerte como la arena, la arcilla, la grava, la perlita, la vermiculita, la fibra de coco y el peat moss, entre muchos otros.
Hoy en día, la hidroponía ha avanzado gracias al desarrollo del análisis químico, y lo ha hecho hasta tal punto que muchos la consideran una esperanza para el futuro de la humanidad. En concreto, podría ser una herramienta fundamental para combatir el hambre y la inseguridad alimentaria creciente a consecuencia de la superpoblación.
Los países menos desarrollados podrían aprovechar el gran potencial de la hidroponía para acabar con los problemas de escasez de suelo para uso agrícola y de sobrepoblación, en su mayoría sumida en una pobreza no ajena a las hambrunas. Al mismo tiempo, los países ricos, como Estados Unidos o Israel, también elijan esta técnica para ganar espacio y beneficiarse de muchas de sus ventajas.

Además de su eficiencia en el uso de recursos como el agua o los nutrientes, de prescindir de la tierra y de precisar mucho menos espacio, la hidroponía supone un ahorro de mano de obra, un control de plagas más sencillo y económico, así como una cosecha de mayor calidad.
La ausencia de malas hierbas, la baja o nula concentración de pesticidas, el posible uso de áreas desérticas o de casi cualquier otro lugar para su desarrollo y su gran sostenibilidad también son importantes puntos a su favor que nos acercan a un mundo más ecológico.
Algunas ventajas de la hidroponía son:
- Es una técnica altamente adaptable a los conocimientos, espacios y recursos de los que dispone cada persona.
- No depende de las condiciones ambientales, por lo tanto, es posible producir cosechas fuera de temporada o cultivar en lugares donde la agricultura tradicional es muy difícil o imposible. Incluso permite el cultivo en las ciudades.
- Hay una posibilidad de automatización casi completa
- Usa de 70-90% menos agua que la agricultura tradicional, por lo tanto, constituye una alternativa sustentable ante la crisis del agua que enfrentamos en la actualidad.
- Permite un gran ahorro de fertilizantes y plaguicidas, ya que las plantas se cultivan en condiciones controladas que favorecen su crecimiento óptimo y libre de parásitos, bacterias fitopatógenas, hongos y toxinas. A su vez, esto hace que los cultivos sean más precoces y uniformes.
Desde un punto de vista económico, la hidroponía conlleva una reducción considerable en los costos de producción debido al ahorro de agua, fertilizantes, pesticidas y maquinaria agrícola. Además, permite ofrecer mejores precios en el mercado, por lo que la inversión inicial se recupera rápidamente.
Desde un punto de vista ecológico, además la hidroponía previene la erosión que resulta de malas prácticas agrícolas. Además, los fertilizantes y los plaguicidas no se incorporan a los mantos freáticos, a los ríos o a los lagos, con lo que se evita una fuente importante de contaminación.

La hidroponía se revela como una solución para luchar contra el cambio climático, la degradación del medio ambiente y la extinción de especies producidas por la sobreexplotación y los cultivos intensivos. También permite un uso más racional del agua, un bien cada vez más escaso. Asimismo, los cultivos hidropónicos son más rentables y fáciles de controlar, lo que los convierte en un arma para combatir el hambre y reforzar la seguridad alimentaria, especialmente en países en desarrollo
La hidroponía también forma parte de las últimas tendencias dentro del Smart Farming, o agricultura de precisión, que consiste en emplear herramientas tecnológicas, desde la geolocalización hasta el big data, la inteligencia artificial, el Internet de las Cosas o los drones, para obtener el mayor rendimiento de los cultivos.
“Que tu medicina sea tu alimento, y alimento tu medicina”.
Hipócrates