Los principios sobre la medición de la resiliencia

La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y el Programa Mundial de Alimentos (PMA) en su Food Security Information Network establece los Principios sobre la medición de la resiliencia. Y así para la FAO y PMA :

La resiliencia es la capacidad que asegura que los factores de estrés y las situaciones de crisis no provoquen consecuencias adversas a largo plazo en el desarrollo

Resilencia: capacidad del ser humano para hacer frente a las adversidades  de la vida, superarse e inclusive, ser… | Frases, Frases y poemas, Frases  pensamientos

Una de las principales características de esta definición es que la resiliencia se comprende y mide en función de los efectos instrumentales que ejerce sobre resultados previstos en materia de desarrollo, que pueden verse afectados por factores de estrés y situaciones de crisis. Definir la resiliencia como una capacidad significa que esta comprende un conjunto de atributos y apoyos ex ante que deberían impulsar favorablemente la función de verosimilitud que describe la relación entre las situaciones de crisis y los resultados en materia de desarrollo, entre ellos, la seguridad alimentaria (ver Barrett y Constas, 2013).

Si bien el concepto de resiliencia está estrechamente ligado al de vulnerabilidad, es importante señalar que la resiliencia no es simplemente lo opuesto a la vulnerabilidad. La vulnerabilidad describe un conjunto de condiciones que impiden a las personas afrontar las adversidades, mientras que la resiliencia comprende una serie de respuestas que pueden oponerse a los factores estructurales y estocásticos que dejan vulnerable a un hogar u otra unidad al exponerse a una serie de situaciones de crisis y factores de estrés. En este sentido, la vulnerabilidad se refiere a un conjunto de características que aumentan la probabilidad de abatimiento cuando se está expuesto a riesgos.

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En la siguiente fórmula simplificada, se resalta la relación existente entre resiliencia, vulnerabilidad y situaciones de crisis, por ejemplo, en relación con la seguridad alimentaria:

Seguridad alimentaria = a (vulnerabilidad, capacidad de resiliencia, situaciones de crisis)

Es importante también definir la resiliencia como una capacidad que evita que las personas, los hogares y las comunidades se sitúen por debajo de un nivel definido normativamente para un resultado dado en materia de desarrollo (ej., seguridad alimentaria, nivel de pobreza, bienestar). Estos argumentos que presentan la resiliencia como una capacidad instrumental vinculada a una norma de referencia se traducen en el primer principio para la medición de la resiliencia:

Principio de medición 1: la resiliencia como una capacidad indexada normativamente.

 La resiliencia es una capacidad que debería indexarse en función de un resultado específico en materia de desarrollo (ej., seguridad alimentaria, pobreza, salud) según un umbral normativo. Por lo tanto, deberían elaborarse mediciones de la resiliencia en relación con el valor instrumental que tiene dicha capacidad para un resultado específico. El resultado de interés debería incluir un límite normativo que defina una condición de umbral bajo la cual se considera inaceptable el bienestar de una persona, un hogar o una comunidad.

En el contexto del desarrollo, tanto en el caso de la asistencia humanitaria como de desarrollo, la resiliencia se valorará en la medida en que mejore el bienestar de las poblaciones. El supuesto tácito de que la resiliencia es una respuesta a una situación de crisis o a un factor de estrés evidencia la necesidad de recopilar datos relacionados con el simple reconocimiento de que las condiciones objetivas que podrían categorizarse como situaciones de crisis son compatibles con las percepciones subjetivas de que esas condiciones se reconozcan como perturbaciones que amenazan algún elemento del bienestar de la persona. El carácter fuertemente personalizado y profundamente situado (en historias personales y contextos locales) de tales percepciones exige el uso de indicadores cualitativos además de cuantitativos:

Principio de medición 2: los estados subjetivos y los datos cualitativos.

El papel que desempeñan los estados subjetivos en la resiliencia, por ejemplo, la percepción de las situaciones de crisis, la utilidad percibida de las medidas adoptadas o no adoptadas y las expectativas generales de los futuros estados debe considerarse como un elemento clave en la medición de la resiliencia. El valor potencial de los indicadores cualitativos debería incluirse como un elemento de dichas evaluaciones subjetivas.

«La resiliencia es saber que eres el único que tiene el poder y la responsabilidad de levantarte».

Mary Holloway

Economía Circular como modelo

La economía circular plantea un modelo económico y productivo caracterizado por la sostenibilidad y el ahorro de recursos y fuentes de energía. Los bienes se producen, se consumen, se reciclan, se producen y se vuelven a consumir, entrando en un ciclo de vida circular. Es un concepto reciente y cada vez más extendido basado en los principios económicos y otros aspectos como el medio ambiente.

En ese sentido, la economía circular propone un modelo productivo austero en términos de utilización de los recursos. De esta manera, a través del respeto al medio ambiente se pretende posibilitar la máxima reparación y reutilización de las materias primas y las fuentes energéticas del planeta, imitando el trabajo desarrollado por la naturaleza.

La Economía circular es un modelo que prima el aprovechamiento de recursos y la reducción de las materias primas. Este sistema se convierte así en una alternativa al actual modelo de extracción, producción, consumo y eliminación, el modelo económico lineal.

Todos los procesos de fabricación de bienes o servicios implican un coste ambiental, tanto a la hora de producir como al acabar su ciclo de vida. Para minimizarlo, la economía circular aboga por la optimización de los materiales y residuos, alargando su vida útil. De este modo se huye del actual sistema lineal de ‘usar y tirar’ y se apuesta por otro respetuoso con el medio ambiente y basado en la prevención, la reutilización, reparación y reciclaje. Este modelo permite extender la vida útil de los productos y dotarlos de una segunda vida.

Para ello es necesario el concepto de las 7Rs Rediseño, Reducir, Reutilizar, Reparar, Renovar, Recuperar y Reciclar, que los productos sean diseñados para ser reutilizados. El ecodiseño considera la variable ambiental como un criterio más a la hora de tomar decisiones en el proceso de diseño de los productos.

Con el modelo de producción actual estamos agotando nuestros recursos naturales, por lo que la economía circular propone un nuevo modelo de sociedad que utilice y optimice los materiales y residuos, dándoles una segunda vida. Para tener un desarrollo sostenible, el producto debe ser diseñado para ser reutilizado y reciclado. Gracias al ecodiseño, desde la primera pieza hasta la última pueden reutilizarse o reciclarse una vez terminada su vida útil. 

Pero la Economía circular no afecta solo a los envases y al gran consumo sino también a otros sectores como la construcción (en los estudios del ciclo de vida de los materiales y en el uso optimizado de los espacios construidos), en la gestión del agua (con procesos de mejora y reutilización) o la movilidad (análisis de los costes de un vehículo en relación con su vida útil y los tiempos de uso).

La economía circular trata de convertir los residuos en nuevas materias primas. Y, además, generar empleo en el contexto de la llamada economía verde

Hay diez rasgos configuradores que definen cómo debe funcionar la economía circular:

El residuo se convierte en recurso: es la principal característica. Todo el material biodegradable vuelve a la naturaleza y el que no es biodegradable se reutiliza.

El segundo uso: reintroducir en el circuito económico aquellos productos que ya no corresponden a las necesidades iniciales de los consumidores.

La reutilización: reusar ciertos residuos o partes de los mismos, que todavía pueden funcionar para la elaboración de nuevos productos.

La reparación: encontrar una segunda vida a los productos estropeados.

El reciclaje: utilizar los materiales que se encuentran en los residuos.

La valorización: aprovechar energéticamente los residuos que no se pueden reciclar.

Economía de la funcionalidad: la economía circular propone eliminar la venta de productos en muchos casos para implantar un sistema de alquiler de bienes. Cuando el producto termina su función principal, vuelve a la empresa, que lo desmontará para reutilizar sus piezas válidas.

Energía de fuentes renovables: eliminación de los combustibles fósiles para producir el producto, reutilizar y reciclar.

La eco-concepción: considera los impactos medioambientales a lo largo del ciclo de vida de un producto y los integra desde su concepción.

La ecología industrial y territorial: establecimiento de un modo de organización industrial en un mismo territorio caracterizado por una gestión optimizada de los stocks y de los flujos de materiales, energía y servicios.

Facultad de Contaduría y Administración - UNAM on Twitter: "Economía lineal  vs economía circular El modelo de economía actual tiene como objetivo  principal el consumo;Actualmente, las organizaciones deben entender que es  necesario

No contamines, los buenos planetas son difíciles de encontrar….